Este tipo de examen trata de la visualización del interior de las vísceras huecas, mediante la introducción de tubos con una fuente de luz y un visor que nos da la imagen en un receptor de imágenes.
Es utilizado para realizar pruebas como: Esofagoscopia,Gastroscopia, Cistoscopia, Broncoscopia
Es preferido para el estudio del aparato digestivo, tanto superior como inferior, menos el intestino delgado.
Para la exploración de las partes a estudiar, se debe introducir el tubo o endoscopio (según la cavidad a estudiar hay varios modelos; de más cortos a largos, cistoscopios, broncoscopios, gastroscopios y colonoscopios) por la apertura natural precisa hasta la zona que se desea estudiar. Es recomendado estar en ayunas o seguir una dieta además de tomar algún tipo de laxante (colonoscopia), en otros se debe realizar análisis de orina para descartar algún tipo de infección (cistoscopia).
Para este tipo de exámenes se recomienda no tomar antiinflamatorios, para reducir el riesgo de sangrado, además de un análisis de sangre.
Tipos de administraciones para los diferentes estudios
Problemas que puede ocasionar este tipo de exámenes.
Ansiedad, náuseas, reacciones vegetativas, usualmente sin importancia.
Existe la posibilidad teórica de provocar una hemorragia o incluso una perforación, por lo que es conveniente que esta exploración se realice en, o cerca de, un hospital con quirófano, aunque estas complicaciones son muy infrecuentes desde la instauración de los tubos flexibles.
Este tipo de estudios debe realizarla un médico experto.
M. Adilia Pizarro Zúñiga
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